Si fuéramos a dejarles un legado, una herencia perdurable y valiosa a nuestros hijos ¿Qué les dejaríamos?
Algunos dirían: … mucho dinero, pero sabemos que los verdaderos tesoros no se pueden comprar ni vender. El dinero es un medio pero no el fin de nuestras vidas. Otros dirían una buena educación y es indudable que la preparación intelectual y académica es importante para su desempeño como seres productivos en el futuro… otros dirían buenas amistades, pues ciertamente marcarán una poderosa influencia en sus vidas. Otros pensarían en un buen ejemplo mostrado en la compasión y amor por los demás, esto… definitivamente transformaría el mundo y las relaciones entre las personas, como lo enseña el primer y segundo mandamiento en las sagradas escrituras, otros dirían una familia sólida llena de amor, comprensión y principios éticos, acompañada con los valores morales… tales como la honestidad, el respeto, la integridad, la solidaridad. Todo eso y mucho más está contenido en el libro de libros: La biblia.
Hoy queremos resaltar su importancia como la obra cumbre de la literatura universal traducida en más de 1800 idiomas, la biblia es el libro más leído y estudiado en la historia de la civilización humana: Los diez mandamientos por ejemplo, son la base de las leyes de la mayoría los países del mundo. El beneficio de sus enseñanzas para los pueblos y su impacto en la historia ha sido incomparable. Todo el mensaje de la buena convivencia y el respeto está basado en la aplicación de los principios y valores morales enseñados por Jesús de Nazaret sobre el amor. La Biblia es una lámpara que ilumina nuestro caminar y el de nuestros hijos. Es una brújula que guía el rumbo de la humanidad hacia el progreso de los pueblos y el bienestar de las familias. Es la luz de la verdad que disipa las tinieblas de nuestros temores y dudas. Es el fundamento de la justicia y la verdad para nuestros gobernantes. Finalmente, no podríamos pasar de largo sin reconocer el impacto, el ejemplo y las verdades que encarnó y enseñó el maestro de maestros: Jesús de Nazaret, quien partió la historia en dos: Nuestro antes y nuestro después de él.
Hoy recuerdo como en la mayoría de nuestros hogares hemos tenido como un gran tesoro la Biblia… que nos ha acompañado en horas inciertas, que nos ha confortado cuando Dios mismo ha hablado a nuestros corazones en medio de las batallas y desafíos cotidianos. Es el tiempo de animar a nuestros hijos, a nuestras esposas, a nuestros educadores, a nuestros vecinos, a nuestras autoridades a encender la lámpara maravillosa de la palabra de Dios y celebrar en nuestro querido municipio de Chía: la semana de la biblia… cuanto bien hará a nuestras familias y a nuestra comunidad retomar algo tan maravilloso que está en las raíces de nuestro pueblo Colombiano: Volveremos a descubrir el valor de la fe y el poder del amor de Cristo y el servicio al prójimo, revelado en el libro más extraordinario de todos: La Biblia, fuente de fe y de verdad. Hoy estamos invitados todos a celebrar: Celebraremos el amor, celebraremos el respeto, celebraremos la integridad, celebraremos, un mejor mañana con la palabra de Dios.